TRUCOS Y CONSEJOS

¿TE GUSTARÍA HACER ESPELEO? AQUÍ UNOS CONSEJOS 

De vez en cuando nos llega alguna consulta de gente que quiere iniciarse en esto de la espeleología, pero no sabe cómo hacerlo ni por dónde empezar.

Aunque resulte obvio decirlo, la espeleología es un deporte que conlleva una serie de riesgos que es necesario conocer y saber minimizar, además de desarrollarse en un entorno bastante hostil (oscuridad, humedad, pozos, etc.) y que suele requerir en muchos casos de material específico. Tampoco es lo mismo entrar en una cueva andando que hacerlo en una sima profunda con pozos fraccionados, o que la cavidad esté seca o discurran cursos de agua por sus galerías. Por todo ello, una actividad que en principio puede parecer atractiva y divertida, en pocos minutos puede resultar en una situación peligrosa o, cuanto menos, hacernos pasar un mal rato.

Para evitarlo, a la hora de iniciarse os recomendamos tener en cuenta las siguientes indicaciones:

Hacerlo de la mano de gente experta y responsable:

No es conveniente aventurarse en una cavidad “a las bravas” y sin ningún tipo de experiencia, ni tampoco fiarse del primero que llega y dice aquello de: “venirse conmigo que yo controlo”, pues luego vienen los sustos y los disgustos. Es mas seguro iniciarse a través de las actividades organizadas por algún club de espeleología, en las que habrá espeleólogos con experiencia para guiar esos primeros pasos y con capacidad para actuar y resolver las situaciones complicadas que puedan presentarse. Ni que decir tiene que, si se tiene la oportunidad, siempre es muy recomendable hacer algún curso de iniciación de los que ofrecen los propios clubs o algunas federaciones territoriales.

Utilizar el equipo adecuado:

Lo principal es contar con un casco, al que se incorporará un sistema de iluminación fiable, además de utilizar un calzado adecuado para este tipo de terreno. Al progresar por el interior de una cavidad, sobre todo en pasos estrechos, es bastante habitual golpearse con salientes de roca, piedras sueltas, o incluso con alguna estalactita en techos bajos. El casco nos librará de sufrir heridas en la cabeza.

Para progresión vertical, se debe utilizar siempre material específico para este fin y, además, debe estar certificado. Dado que la inversión inicial en material puede resultar algo elevada, no es conveniente empezar comprándolo todo si no se tiene claro todavía que se va a seguir practicando espeleología. Los clubs que organizan salidas de iniciación suelen tener algunos equipos para ello y seguramente os los podrán prestar. Más adelante ya iréis adquiriendo el vuestro propio.

Hay que huir de los inventos y desconfiar de todo aquel material defectuoso, de procedencia desconocida o que os encontréis por ahí, ya que vuestra seguridad va a depender de él en todo momento.

Estar federado:

Aunque no es imprescindible estar federado para practicar espeleología, si que resulta muy recomendable, ya que con la tarjeta federativa se adquiere, entre otras cosas, un seguro de accidentes en el que se incluye también el rescate. Como se suele decir en estos casos, es mejor disponer de él y no tener que usarlo, que lo contrario. Imaginaros por un momento que pasaría si alguien que no está federado tiene un accidente en una cueva o se queda atrapado en su interior y hay que ir a rescatarlo. Tanto el rescate como la atención médica tienen unos costes que luego tendrá que asumir el rescatado, y por lo que he oído, no son pequeños. Así pues, es mejor tener cubierto este tema.

La tarjeta federativa tiene validez durante todo un año y se tramita a través de los clubs o directamente en las federaciones territoriales. Existen varios tipos de cobertura para adaptarse mejor a las condiciones en las que cada uno practica la actividad. También existe la posibilidad de tramitar seguros para una única salida o un fin de semana.